Zelda breath of the wild: Explora sin límites
Nadie esperaba que después de 18 entregas de la serie The Legend of Zelda se pudiera crear un nuevo título que ofreciera a los fanáticos y nuevos gamers mayores niveles de exploración. Pero nos equivocamos: zelda breath of the wild lo logró.
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Y lo ha hecho con creces. El juego rebasa los límites de la imaginación de cualquiera que tenga un control en las manos mientras se juega en las consolas Wii U y Nintendo Switch.
El productor Eiji Aonuma incorporó gráficos de alta definición que brinda experiencia sensorial única y expandible basada en el modelo de mundo abierto, el mismo que Shigeru Miyamoto soñó cuando era niño antes de crear The Legend of Zelda.
Historia Zelda breath of the wild:
Link, el personaje de la historia, despierta de un letargo de 100 años. A su alrededor tiene un mundo destrozado por una catástrofe vinculada a la aparición de un ser desconocido: Ganon. Una voz guía al joven a dar sus primeros pasos. Poco a poco, Link comienza a comprender el mal al cual se enfrentará para rescatar a la princesa Zelda, aunque, la verdad, ese no será el propósito del juego.
Habilidades
En el juego, las habilidades de Link se asemejan a lo que estábamos acostumbrado hacer en las pasadas entregas como explorar el mapa nadando, montado a caballo o en tren o barco.
Sin embargo, en esta nueva entrega Link puede escalar las montañas, lo que da mayor visibilidad y libertad de acción. También puede cocinar sus propios alimentos. Todo sin dejar de ser un juego divertido, desafiante e inteligente.
Lo que sí llama la atención es la eliminación de los templos de las pasadas entregas. Ahora en el recorrido puedes encontrar 120 santuarios. Ahí se pueden ganar recursos que te permite luego usar bombas, congelar agua y paralizar objetos en combate. Por supuesto, las mecánicas siempre dependerán por donde estás transitando en el juego.
Jugabilidad en Zelda breath of the wild
Hay que decirlo hasta la saciedad: este juego otorga a los jugadores un nivel de libertad que difícilmente se consigue en otros videojuegos de mundo abierto. Estamos seguros que esta entrega será referencia para inspirar a otros desarrolladores de juegos.
El juego está hecho para que no sigas una única ruta. Eso abre un sinfín de posibilidades para resolver un acertijo o solucionar algún problema. De hecho, es fácil perderte y entretenerte con las misiones secundarias y olvidarte de la historia principal.
Es una sensación de exploración y libertad impresionante, que se amalgama con postales que te adentran en un mundo maravilloso y mágico. Todo se conjuga con una libertad de superar los obstáculos de forma no lineal; es decir cómo y cuándo nos dé la gana.
Sin duda, este videojuego sigue siendo un clásico de mundo abierto que se ganó un lugar en la vitrina de títulos que cualquiera debe jugar sí o sí. Lo mejor es que sabemos que esto apenas es el principio de una legión de satisfacciones que sólo Zelda nos puede ofrecer.